Vladimir Barahona (1965- )

¿Cuándo comienza el amor y cuando termina?, no lo sé. Las cosas pasan y sin darnos cuenta estamos en algún lugar, viviendo alguna parte de nuestra vida. No lo preparamos, la vida nos lleva.

Mi nombre es Vladimir Barahona, quien sin darme cuenta, me hice ferroviario. Como mi abuelo, como mi padre y mis tíos.

A través de todo este tiempo que en realidad ha sido toda una vida, fue creciendo el amor por mi trabajo. Allí conocí grandes personas que fueron pasando por mi recorrido ferroviario, movilizadores, palanqueros, conductores, maquinistas, ayudantes y jefes. Hombres honestos, sencillos, alegres, con alma ferroviaria que me enseñaron el oficio y el amor por los fierros.

Yo los vi pasar, así como también yo voy pasando. Se extinguieron y nos extinguimos sin un reconocimiento personal a nuestra labor. Entonces me pregunté por qué aquellos heroicos ferroviarios con nombre y apellido, que dieron su vida a bordo de los trenes o en las diferentes labores ferroviarias para hacer surgir la patria, se van sin que exista de ellos memoria.

Me decidí a hacer honor a través de un libro de anécdotas ferroviarias a todos los esforzados tiznados que marcaron y siguen marcado la historia de los ferrocarriles de nuestro país. He pretendido de alguna forma y con el mayor respeto no solo contar las anécdotas, sino al mismo tiempo recordar los nombres de aquellos protagonistas que forjaron aquellas historias, aun cuando los mismos ya se hayan olvidado.

Mezclando el pasado y el presente, he entrecruzado vivencias dentro de las mismas vías ferroviarias y aunque solo he podido contar una parte de ellas, pues muchas han ido quedando en el olvido llevadas a la tumba por sus protagonistas, también queda mucha historia que con dedicación pueden seguir surgiendo en las diferentes zonas de nuestro país para contar al lector amante ferroviario, las singulares anécdotas en el desarrollo del ferrocarril que ha dado vida a los pueblos y en donde anónimamente hemos seguido haciendo historia.

He publicado «Ferroviarios del cielo y la tierra: anecdotario» y «Retratos ferroviarios».